XIII) Nos robaron hasta la ropa

Horas o tal vez minutos después los padres de Silvia encendieron la luz del sótano. Miré a mi alrededor pero allí no estaba Silvia. Cuando su padre me quitó la cinta americana lo primero que dije alterado fue:

Roberto: ¿Donde está Silvia? ¿La ha pasado algo? ¿Está bien...?
Juan: Tranquilo, ella está en el hospital, la han pegado una paliza y han robado vuestra ropa para asegurarse de que no os escapárais, para robar en la casa. Lo que es raro es que a ti no te hayan hecho nada.... Tranquilo luego te llevo a verla.
Roberto: Yo creo que está bien claro el por qué han pegado a su hija, usted es policia, y sabrian perfectamente que Silvia es su hija y por eso no la ataron como a mi, yo creo que ha sido alguien que le conoce y más bien es como una venganza...
Juan: Quizás tengas razón... vete a casa a descansar luego me paso a buscarte y respecto a la juerga de anoche no voy a decir nada... pero no quiero que empecéis a beber tan jóvenes ¿ok?
Roberto: No volverá a pasar, gracias